Los remedios caseros para la tos, tienen en común que su eficacia no esta demostrada por estudios científicos. Sin embargo, Hans-Michael Mühlenfeld, de la Asociación Alemana de Médicos, los recomienda a sus pacientes "porque parece que ayudan a muchos enfermos".
El médico de Bremen subraya que la tos no es una enfermedad, sino una "reacción sensata para volver a estar bien". Este reflejo natural sirve al organismo para eliminar los agentes patógenos de las vías respiratorias lo más rápidamente posible. "Los remedios caseros para la tos pueden facilitar que el organismo haga frente con eficacia a la tos", dice Mühlenfeld.
Aliviar la Tos con estos Remedios Caseros
1. Inhalación para la irritación de la tos y la mucosidad
Vierta agua caliente en un inhalador con un accesorio para la
boca y la nariz, luego inhale y exhale con calma y profundamente, y
preferiblemente repita la inhalación cada tres horas. Si no tienes un
inhalador, también puedes utilizar el clásico cuenco y la toalla, pero ten
cuidado por el riesgo de quemaduras. Por lo tanto, mantenga la infusión
caliente lejos de los niños y sólo baje la cabeza sobre ella cuando se haya
enfriado un poco. Lo mejor es utilizar un inhalador con un accesorio para la
boca y la nariz.
Una inhalación con una infusión de salvia tiene un efecto calmante sobre las mucosas irritadas, además del efecto hidratante. "La salvia actúa como un ungüento y así calma la irritación de la tos", explica Mühlenfeld. Esto es especialmente útil para la tos seca.
Si la tos va
acompañada de esputo, es decir, se vuelve "productiva", las
inhalaciones con agua caliente pueden ayudar a licuar el moco duro.
Los aceites esenciales como el mentol son los más recomendados por los médicos de cabecera para los resfriados y la sinusitis. Sin embargo, también pueden ayudar a aflojar la mucosidad atascada en las vías respiratorias durante la tos.
Importante: Los niños pequeños no deben inhalar
sustancias que contengan mentol o sustancias similares de fuerte olor porque
pueden desencadenar una parada respiratoria.
El aceite esencial también puede
ser problemático para los asmáticos. En caso de duda, es aconsejable que
pregunte a su médico de cabecera qué puede utilizar.
Las inhalaciones o baños de vapor, es otra gran opción que ayuda a tratar las irritaciones pulmonares y la tos, y se pueden hacer añadiendo al agua Extracto de Propóleo o aceite esencial de Eucalipto. Otros buenos consejos para tratar este problema son beber zumos ricos en vitamina C, como el de naranja y acerola, que ayudan a fortalecer el sistema inmunitario, y chupar miel, menta o caramelos de frutas a lo largo del día para mantener la garganta hidratada y estimular la producción de saliva.
2. El zumo de cebolla, la miel para reducir la tos y los bronquios
Uno de los más antiguos remedios caseros para la tos es el
jugo de cebolla con caramelo de roca. Se prepara rápidamente. Basta con cortar
una cebolla de cocina en dados y hervirla con caramelo de roca a fuego lento.
Dejar reposar el conjunto durante un tiempo, colar la decocción a través de un
paño o un filtro de café y luego tomarla a cucharadas. Si puedes conseguir el
jarabe casero para la tos, puedes esperar un alivio.
Esto se debe a que las cebollas contienen aceite esencial, compuestos que contienen azufre y flavonoides, que en combinación se dice que tienen efectos germicidas y ligeramente antiinflamatorios. "Esto calma los bronquios y alivia la irritación de la tos", dice Mühlenfeld.
También se pueden mezclar las cebollas con la miel y el jarabe resultante se puede servir con una cuchara.
El experto Mühlenfeld considera estos resultados con cierta
cautela. Pero también sus experiencias como médico de familia hablan de que la
miel puede aliviar la irritación de la tos. Sin embargo, este remedio casero
sólo es adecuado para niños mayores de un año. En los bebés, existe el riesgo
de que las bacterias que puedan haber llegado a la miel de abeja desde el medio
ambiente puedan desencadenar una enfermedad potencialmente mortal: el llamado
botulismo infantil.
3. El remedio casero más importante: beber mucho líquido
Uno de los clásicos de los remedios para la tos de la abuela es el té
para la tos. Puede contener plantas medicinales que son más propensas a aflojar
la flema y facilitar la tos, por ejemplo el tomillo y la hierba de la vaca.
También puede mezclarse con hierbas que se cree que tienen propiedades para
aliviar la tos, como el malvavisco, la hierba de las costillas o la hiedra.
Además, una gran tetera ayuda aunque sólo sea porque contribuye a que el
paciente beba suficientes líquidos.
"Beber mucho líquido es probablemente el más importante de los remedios caseros para la tos", dice Mühlenfeld. Contrarresta la deshidratación de las membranas mucosas y favorece la licuación de la mucosidad en las vías respiratorias. Quienes deban prestar atención a su cantidad de bebida, por ejemplo, por estar enfermos del riñón o del corazón, deben discutir la medida adecuada con el médico de cabecera.
4. Compresas de patata: la creencia en ellas ayuda
Algunos enfermos de tos confían en las compresas de patata
calientes. Para ello, se hierven de cuatro a seis patatas de tamaño medio hasta
que estén blandas, se colocan en un paño de cocina y se hacen puré.
Una vez que
la cataplasma se ha enfriado lo suficiente como para evitar el riesgo de
quemaduras, se aplica en el pecho y se deja allí hasta que se haya enfriado.
El médico de las familias de Bremen nos deja en claro:
Ya sea una envoltura de patatas o la
receta familiar de una tisana: "Si alguien ha tenido una buena experiencia
con uno de los tantos remedios caseros para la tos, debería utilizarlo", es su consejo. Porque la mera
creencia de que va a ayudar puede hacer que el paciente se sienta mejor: efecto
placebo de palabra clave. Lo mismo ocurre si otra persona hace el té, prepara
el jugo de cebolla o incluso sólo recomienda sus recetas para la tos. "El
hecho de recibir atención, de que alguien se ocupe de ti, contribuye al
bienestar del enfermo", concluye Mühlenfeld.
5.- Remedio casero de miel de abeja con limón y propóleo
El jarabe casero de miel con limón y propóleo es estupendo
para hidratar y aliviar la irritación, dolor de garganta, lo que ayuda a reducir la
tos, para prepararlo necesitas:
Ingredientes:
- 8 cucharadas de miel
- 8 gotas de extracto de propóleo
- Zumo de 1 limón mediano.
PREPARACIÓN:
En un tarro de cristal con tapa, añadir la miel y el zumo de limón y poner las gotas de extracto de propóleo. Remover bien con una cuchara para mezclar bien todos los ingredientes.
Este jarabe debe tomarse de 3 a 4 veces al día o siempre que se sienta la garganta seca y rasposa, durante unos días hasta que los síntomas desaparezcan.
El limón es rico en vitamina C, que ayuda a reforzar el sistema
inmunitario, mientras que la miel hidrata y alivia la garganta. El extracto de
propóleo es uno de los remedios caseros para la tos con acción antiinflamatoria, que ayuda a aliviar
el dolor de garganta y trata la sequedad de garganta y la tos irritativa.
6.- Té de equinácea con miel de abeja y jengibre
La equinácea y el jengibre estas plantas medicinales son muy
utilizadas para el tratamiento del resfriado y la gripe que es de gran ayudan para
fortalecer el sistema inmunológico, que
es lo que ayuda al cuerpo a tratar y reducir la tos. Para preparar este té se necesita:
Ingredientes:
- 2 cucharaditas de raíz o en todo caso hojas de la planta equinácea
- 5 cm de jengibre fresco
- 1 litro de agua hirviendo
PREPARACIÓN:
Añadir los ingredientes al agua hirviendo, tapar y dejar reposar de 10 a 15 minutos. Por último, colar y beber.
Esta infusión de debe tomar 3 veces al día o siempre que la garganta esté muy seca porque además de ayudar a fortalecer el sistema inmunológico el agua caliente y la miel de abeja permite ayudar a suavizar e hidratar la garganta afectada, reduciendo la irritación y la tos.
7.- Té de eucalipto con miel
El eucalipto es una planta medicinal muy utilizada para el
tratamiento de gripes y resfriados, así como para el tratamiento de problemas
respiratorios como el asma o la bronquitis, siendo uno de los mejores remedios caseros para aliviar la tos. Para preparar un té con esta planta se necesita:
Ingredientes:
- 1 cucharadita de hojas de eucalipto picadas;
- 1 taza de agua hirviendo;
- 1 cucharada de miel.
PREPARACIÓN:
En una taza colocar las hojas de eucalipto, la miel y cubrir con agua hirviendo. Entre 10 a 15 minutos dejar reposar y colar.
Esta infusión se puede tomar de 3 a 4 veces al día, y para preparar este remedio casero también se puede utilizar aceite esencial de eucalipto, añadiendo de 3 a 6 gotas en cambio de usar las hojas secas.
Importante: Si a la tos le acompaña la fiebre o si la tos no cede gradualmente después de una semana, es aconsejable acudir al médico.
En caso de falta de aire, llame a los servicios de emergencia.
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